Fragmento #26 - Sombra y ventilador

El calor nos retiene en casa. Claro, que no tenemos aire acondicionado, pero a la sombra y con el ventilador en funciones sobrevivimos. Vemos telebasura y comemos patatas. Obama no bebe, claro, aunque fuma por dos. Por tanto, la cerveza es para mí.
Suena el móvil.
- Sí.
- David, hijo, ¿cómo estás?
- Ah, hola, mamá. Aquí, muerto de calor.
- ¿Ya has acabado tus exámenes?
- Sí, hace unos días.
- ¿Qué tal?
- Pues ahí van, a ver. Lo más seguro es que me caigan un par de este cuatrimestre para Septiembre, pero a ver.
- ¿Y cuándo te vuelves al pueblo?
- Pues verás, el piso lo tenemos pagado para todo el verano, así que pensaba pasar unos cuantos días más aquí, bueno. Tal vez la semana que viene.
- Tu padre está deseando verte.
- Ya.
El resto de la conversación pierde importancia, en fin. Es una madre preguntando a su hijo. Cinco minutos más tarde, cuelgo. Obama me observa, intrigado. Me encojo de hombros, me levanto. Él apaga la tele y coge la guitarra, yo me encierro en mi habitación.
Fuera lo escucho cantar Let it be. Me echo en la cama. La verdad es que quería ir a la Fnac a comprar unos discos, pero el calor es bastante disuasorio. De pronto, suena mi móvil. Un mensaje. Mamen.

"Hola, poeta. Mañana fiesta en Suite. Psicología, Filología, Odontología, etc...¡y yo! Jeje. Vente. Besos, guapo".