Ankaa Estrella de Tinta
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Personaje Nombre: Astrid
| Tema: Fragmento#82 - Lo que había en el sobre Jue Nov 13, 2008 1:30 am | |
| Miércoles, 12 de noviembre de 2008 En Sevilla He pasado la noche en vela, pensando. Mario no tenía mala intención cuando abrió el sobre, seguramente pensó que sólo era eso, un sobre, nada más, ¿por qué debería saberlo? Ni siquiera he sido capaz de sincerarme con él, ¿qué puedo esperar entonces? Salgo al salón y le veo en el sofá, otra vez incómodo en su propia casa y, de nuevo, por culpa mía. Me acerco. Está despierto. Me siento y el se aparta haciéndome sitio. Me estiro a su lado y me acurruco bajo las sábanas. Están calientes y huelen a él. -Lo siento… No debí ponerme así. Seguramente debería agradecértelo, yo nunca lo habría abierto. Sus brazos me rodean con ternura y me dan a entender que todo está perdonado, pero no me gustan las cosas que pensé, creer que me había traicionado cuando él no ha hecho más que ayudarme. Aprieto sus manos contra mi pecho, intentando retenerle unos segundos más. Entonces recuerdo el sobre. -¿Qué había dentro? –pregunto. -¿Del sobre? Medita sobre ello. Tarda unos segundos en responder. -Pues… una llave y un papel con un nombre y un número, como una clave. ¿Una llave y una clave? ¿Para qué? ¿Por qué me dejaría eso e insistiría en que era importante? -No lo sé… Me ha oído… Ahora parece que ya pienso en voz alta. -¿Quién te dio el sobre? –continúa. Recuerdo a papá cuando me lo dio, justo antes de bajar las escaleras, antes de que su cuerpo se meciera como una muñeca de trapo rota y sin relleno… -¿Y para que te lo dio? -No lo sé... me lo dio... quería protegernos... Me estremezco. La sombra parece sonreír desde los pies del sofá. Intento hacerme más pequeñita, volverme un cojín en los brazos de Mario para que eso no me pueda alcanzar. -Pues... parece como la llave de una caja fuerte y una contraseña para algo... Él sigue hablando, pensando en el contenido de la nota. -Quizá pensó que lo podría llegar a necesitar... –susurro -. ¿Me ayudarás a saber qué es? ¿Qué abre esa llave? –pregunto. - Claro, Astrid... Parece importante para ti, ¿no? –responde. -Sí... podría ser importante para saber por qué. Por qué nos dejó, por qué decidió matarse… La tristeza se agolpa en mis ojos. -¿Qué pasa, Astrid? -Podría segur siendo una niña... Podría serlo si no se hubiera ido... La pena, la ira de Laura, los monstruos… Me lo han robado. Mario vuelve a estrecharme entre sus brazos y, girándome, me besa en la frente. Apoyo, como tantas otras veces, mi cabeza en su pecho, escuchando el compás de su corazón. Cierro los ojos. Tranquila, en paz junto a él. -Siento todo lo que te dije antes –murmuro cuando el sueño me vence. -No te preocupes... Yo te ayudaré. Todos tenemos fantasmas del pasado que nos agobian... Sus palabras me acunan al mundo de Morfeo, no llego a entender lo que dicen, pero son cálidas, llenas de un amor que hacía tiempo no sentía. Me abandono y dejo que me cuide, al menos por esta noche. (Fragmento enlazado con el nº121 de Mario)
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